Siempre que se toman decisiones sobre inversiones, operaciones u otros negocios, se pasa por un proceso de análisis financiero.

Es una parte clave de la evaluación de la viabilidad y la salud financiera, y puede adoptar muchas formas, dependiendo del contexto. Es importante saber cómo y cuándo realizar un análisis financiero, en qué situaciones resulta útil y qué tipos de análisis son los más relevantes para su situación.

Conceptos básicos del análisis financiero

En un nivel básico, el análisis financiero significa simplemente examinar la información y los datos sobre algo con el fin de evaluar su salud financiera actual y futura.

Un ejemplo sencillo de análisis financiero podría ser la evaluación de la viabilidad de un nuevo plan de marketing para su propio negocio, en el que podría examinar los costes frente a las ventas previstas; o podría ser un análisis en profundidad de una empresa multimillonaria antes de una posible fusión.

En el contexto del comercio y la inversión, el análisis de datos financieros es una forma útil de conocer mejor una empresa y su infraestructura, y de emitir juicios sobre su solvencia, seguridad y rentabilidad.

Esencialmente, es un marco que los traders pueden utilizar para analizar una inversión potencial y preguntarse: «¿Es éste un lugar en el que quiero invertir mi dinero? ¿Va a ser una operación sólida?».

El análisis financiero puede ayudar a los traders a:

  • Comprender claramente la salud financiera de una entidad.
  • Minimizar el riesgo
  • Identificar oportunidades de trading
  • Optimizar la rentabilidad financiera
  • Tomar decisiones con conocimiento de causa

Cómo realizar análisis financieros

Un buen análisis financiero implica un enfoque sistemático que combine técnicas cuantitativas, conocimientos del sector y capacidad analítica para interpretar con precisión los datos financieros.

El proceso exacto variará en función del contexto y la profundidad del análisis: los pasos de nuestro ejemplo de campaña de marketing pueden ser más breves que los de una fusión a gran escala, pero los principios siguen siendo los mismos.

Recopilación de datos

El primer paso es la investigación básica, recopilando toda la información financiera clave sobre una empresa. Esto incluye las cuentas anuales, los balances y los estados de flujo de caja. En esta fase, es importante estandarizar los datos si va a comparar más de una opción comercial. Esto podría significar convertirlo todo a una moneda, ajustarlo a la inflación… cualquier cosa que le permita hacer una comparación justa.

Calcular ratios y métricas

Ahora puede utilizar los datos que ha recopilado para realizar algunas pruebas financieras y calcular diversas métricas para obtener una indicación de la salud financiera de una entidad y su idoneidad para la inversión. Los ratios de liquidez, rentabilidad y solvencia pueden proporcionar una instantánea del rendimiento financiero de una empresa.

Análisis de tendencias

El seguimiento de los datos financieros a lo largo del tiempo permite a los analistas identificar tendencias y patrones. Esto es crucial para identificar posibles oportunidades de crecimiento o señales de advertencia de dificultades financieras.

Factores cualitativos

El análisis financiero no se limita a las cifras.

También es importante tener una visión más amplia, por lo que hay que fijarse en aspectos como la estructura de gestión y los cambios recientes o inminentes, las tendencias generales del mercado y del sector, y los factores globales o políticos que puedan suponer una oportunidad o una amenaza en el futuro.

Interpretación e informes

El último paso consiste en reunir toda la información recopilada y analizar el panorama que se crea.

Los informes deben ser claros y viables: el objetivo del análisis financiero es fundamentar la toma de decisiones, por lo que en este punto debe haber conclusiones claras.

Tipos de análisis financiero: Fundamental vs. Técnico

Existen dos tipos principales de análisis financiero: el análisis fundamental y el análisis técnico.

Estos dos enfoques distintos ofrecen a los operadores diferentes formas de evaluar los activos, y cada uno de ellos tiene sus pros y sus contras.

Análisis fundamental

El análisis fundamental es una inmersión profunda en el valor de una inversión mediante la evaluación de los factores subyacentes que impulsan su valor.

El objetivo del análisis fundamental es determinar si algo está infravalorado o sobrevalorado. Es excelente para obtener una perspectiva muy detallada y a largo plazo de una empresa, pero requiere mucho tiempo y su uso de datos cualitativos puede hacerlo subjetivo.

El análisis fundamental utiliza:

  • Datos sobre estados financieros, ingresos y beneficios
  • Indicaciones económicas externas, como los tipos de interés y la inflación
  • Un análisis de todo el sector y del potencial de crecimiento
  • Información sobre la calidad del equipo directivo de la empresa y su trayectoria

Análisis técnico

El análisis técnico, por el contrario, examina datos cuantitativos como los patrones de precios, el volumen de operaciones y los datos históricos del mercado para predecir los movimientos futuros de los precios.

La diferencia entre el análisis fundamental y el técnico es que el primero asume que la valoración es exacta y se fija en los movimientos de los precios.

Es más objetivo, más fácil de interpretar y resulta ideal para el análisis a corto plazo, pero puede ser un poco superficial y pasar por alto factores subyacentes importantes.

El análisis técnico utiliza:

  • Gráficos de precios que muestran los movimientos históricos de los precios, las pautas y las tendencias.
  • Indicadores técnicos como el índice de fuerza relativa (RSI) y las medias móviles de divergencia y convergencia (MACD) para conocer el impulso de los precios y los posibles cambios de tendencia.
  • Análisis del volumen para ayudar a indicar la fuerza o debilidad de un movimiento de precios.

Como inversor u operador, el análisis financiero es una herramienta indispensable, y nadie debería tomar decisiones importantes sin antes recopilar y evaluar información financiera.

Si conoce el valor y las técnicas del análisis financiero, podrá realizar operaciones e inversiones con confianza, allanando el camino hacia un futuro financiero más seguro y próspero.

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Este material está pensado únicamente como información general, y no como consejos financieros ni de ninguna otra clase en el que el usuario deba confiar, y no debe considerarse como tal. INFINOX no está autorizada a proporcionar consejos de inversión. Ninguna de las opiniones que aquí aparecen constituye una recomendación por parte de INFINOX o del autor, que pueda hacer pensar a un usuario concreto que una inversión, transacción o estrategia financiera o de inversión es adecuada para él.

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